Ayuda a conectar con la biografía, la dignidad y el sentido de la vida de cada persona”. De esta manera Juan Pedro Arbizu, Psicólogo Clínico y responsable del Servicio de Psicología de San Juan de Dios y EAPS, define el beneficioso efecto de la música aplicada como terapia en personas que viven el final de la vida. La denominada “Historia Sonora del Paciente”, se convierte así en la “columna vertebral” de la intervención: “se parte de la singularidad musical individual, de los sonidos y melodías que han acompañado la vida de esa persona y que marcan su biografía”, apunta.